El vidrio ha formado parte de la historia moderna del Estado de México. Por ejemplo, en la entidad se encuentra el vitral más grande del mundo; y en el antiguo edificio del Centro Cultural Toluca, en donde la entonces cervecería fue la primera en establecer una fábrica de vidrio en la región.

Una historia que se ha fundido con el tiempo y las familias de la ciudad, convirtiendo al vidrio en el camino de la expresión. Tal como sucede con la familia López Berber que se ha destacado en el trabajo de vitrales y la utilización del vidrio en el desarrollo de nuevos conceptos como la joyería de autor.

De fragilidad y resistencia es una exposición que presenta el trabajo del artista Ramón López Sepúlveda, autor de los vitrales de la Catedral de Toluca y otras iglesias de la entidad; y de su hija, Adriana López Berber quien desde hace años ha desarrollado un concepto de joyería de autor que, además, ha incorporado un proyecto de filantropía, donde materializa su causa social en vidrio, con la participación de distintas organizaciones de la sociedad civil.

Dos personajes entrañables de Toluca quienes nos hablan de la fragilidad del vidrio, pero la resistencia de la expresión.

*Este artículo está basado en De fragilidad y resistencia, escrito por Centro Cultural Toluca, publicado en CENTRO CULTURAL TOLUCA, Memoria 20216-2020. Centro Cultural Toluca. Enero 2021.